Qué plantar en nuestro huerto urbano
Al principio se recomienda empezar con cultivos sencillos que no nos den demasiados problemas. Por ejemplo, aquellos a los que no le afecten graves plagas y enfermedades, que tengan un ciclo corto, que se puedan cultivar durante casi todo el año y que sean cultivos de fácil manejo. Para esto nos interesa plantar especies como ajos o cebollas, acelgas, lechugas, rábano… las cuales cumplen con todos estos requisitos.
Cómo abonar
Las plantas se alimentan de los nutrientes minerales que hay en el sustrato y que extraen mediante sus raíces.
El sustrato
El uso de un buen sustrato nos asegurará un buena recolecta. Entre muchas de sus ventajas destaca la capacidad de almacenar agua y nutrientes que posee, algo fundamental ya que en nuestro huerto las plantas tendrán poca profundidad de sustrato para que las raíces busquen el alimento. Además, el sustrato orgánico pesa hasta tres veces menos que la tierra normal y por lo que no carga en exceso el balcón o la mesa sobre la que situemos el huerto. La frecuencia recomendable ronda al menos las dos veces por año.
Cómo regar
El riego es otra de las claves del éxito de nuestro huerto urbano. La frecuencia depende de la época del año y de la cantidad de plantas que hay en el huerto. En verano, por ejemplo, es fundamental regar dos o tres veces al día.
Control de plagas
Cada cierto tiempo conviene observar el huerto para evitar la aparición de posibles plagas. No se recomienda la utilización de tratamientos químicos para combatirlas, ya que generalmente son tóxicos y no respetan a los enemigos naturales de las plagas.
¿Quieres saber más sobre el tipo de abono o sustrato para tu huerto urbano? No dudes en consultarnos por teléfono, desde nuestra propia web o visitando nuestras instalaciones!